Mi primer Tiburón
En el 2003, tuve la oportunidad de visitar uno de los acuarios más reconocidos del mundo, el Monterey Bay Aquarium en California. Durante mi asombroso recorrido entre el bosque de algas gigantes, nutrias marinas rescatadas y medusas que parecen de otro mundo, llegue a la exhibición de la bahía exterior. Allí pude ver por primera vez atunes enormes, pericos, tortugas marinas y hasta un gigantesco pez luna; pero lo que más me impresionó fue ver a los tiburones. Ver tiburones martillo, tiburones de aleta y tiburones galápagos nadando juntos fue genial, pero ver a un tiburón oceánico de puntas blancas generó una conexión inmediata que hasta estos días es muy especial para mí.
Ese año, tuve la oportunidad de empezar a trabajar en el Monterey Bay Aquarium y tuve el privilegio de compartir la historia no solo de este tiburón, sino de muchos otros que se encuentran en peligro por actividades humanas y sobrepesca y explicar por qué son importantes para el equilibrio del océano.
Mi segundo Tiburón
Grande sería mi sorpresa de que, al año siguiente, tuve la oportunidad de ver a otro depredador tope: un tiburón blanco juvenil. Después de muchos años de investigación por parte de biólogos marinos, tuvimos la oportunidad de conectar a más de un millón de personas con este maravilloso tiburón y compartir su historia por más de 6 meses antes de ser liberada en la bahía de Monterey. Gracias a este trabajo y a la investigación realizada, el tiburón blanco ahora es una especie protegida en California.